Roberto Franco Lluch

 Si estoy aquí es gracias a Berta. Ella fue quien me introdujo en todo este mundo y ya han pasado 6 años desde que vivo entre cuerdas y mosquetones. Soy Ingeniero Industrial, tengo 25 años y mi gran pasión es la montaña.  Mis primeras salidas (Mayo 2005) fueron en Peñas de Guaita (Puzol) dónde aprendí a ponerme el arnés y hacerme el ocho. Poco a poco le fui cogiendo el gustillo a esto de escalar y desde entonces no he parado.

 

La primera salida a la Alta Montaña fue aquel mismo Verano de 2005 en el que nos fuimos a Sierra Nevada. Estuvimos 4 días de travesía los que nos dieron para subir a diez 3000's (Mulhacén, Cerro Pelado, Puntal de Vacares...). No estuvo mal para ser la primera vez!!

En 2006 conocí Pirineos, mis primeras cumbres fueron Perdiguero, Comaloformo, Maladeta (entre otros). Me quedé sorprendido y a la vez fascinado con el contraste entre Sierra Nevada y Piris, esto último mola más!! Era momento de salir de España así que en Verano de 2006 marchamos toda la familia al Cáucaso a intentar subir el punto más alto de Europa, el Elbrus 5642m. Debido a mi falta de experiencia en altura, tuve que retirarme en el collado (5400m) que separa ambas cumbres.

Entre viaje y viaje intenté trabajar todo lo que pude mientras estudiaba, ahorrar al máximo para poder viajar en verano a conocer otros sitios, otras montañas. En Julio de 2007 le tocaba el turno a Alpes y en este viaje conseguí hacer mis primeros pinitos en 4000's. Subimos el Castor y Signalkuppe (también conocida como Punta Gnifetti).

Ha pasado mucho tiempo desde aquellos veranos y poco a poco hemos ido aumentando el ritmo de salidas de escalada y al mismo tiempo de montaña. Unas veces en familia, otras con amigos del Grupo Montaña Politécnico y muchas otras Berta y yo solos. Poco a poco fuimos haciendo vías de escalada semi-equipadas y tanto fue la insistencia en esta modalidad, que después de estar escalando en Dolomitas en Julio de 2008 (Tofana di Rozes, Cinque Torri, Picola Falzarego, Marmolada...), en agosto cumplimos un gran sueño, escalar el Naranjo de Bulnes.

Hemos subido muchas otras montañas en estos 3 últimos años y quizá las más destacada fue en agosto de 2010 cuando TODA la familia alcanzamos la cumbre del Kilimanjaro. Fue un momento muy especial, quizá el que más desde que hago montaña, pues estar los 6 en el techo de África es un momento inolvidable.

Quedan muchas montañas por subir, paredes que escalar y valles por conocer. No me importa dónde ir ni que escalar, tan sólo me conformo con tener el tiempo suficiente para poder practicar el deporte que me apasiona y realmente me hace feliz.

Salud y montaña.